La paciencia tiene un límite

viernes, 20 de marzo de 2009

Los que me conocen bien saben que tengo más paciencia que el santo Job. Pero todo tiene un límite.
Nunca llegaré a comprender a los personajes que experimentan orgasmos mentales haciendo daño a los demás, sea de palabra o de obra. Tristes vidas las suyas que necesitan meter cizaña, insultar, soltar sapos y culebras por su boca (o por sus teclas) con la única finalidad de molestar a gente que ni siquiera conoce. Ignoro si así se sienten superiores, si se meten por las noches a la cama con la satisfacción del deber cumplido, si piensan que la tienen más larga que nadie o si se creen en posesión de la verdad absoluta y relativa. Ni lo sé ni me importa.
Lo que sí me importa es que personas a las que quiero tengan que estar leyendo improperios hacia ellos y estupideces sin sentido continuamente y que no se sientan con la libertad de escribir libremente por temor a que un cretino haga mofa de cualquier cosa que digan.
No quería eliminar la posibilidad de escribir como anónimos, primero porque jamás me gustó que pagaran justos por pecadores, y segundo porque no se eliminaría el problema. Ya decía mi abuela que cuando un tonto coge un camino, o se acaba el tonto o se acaba el camino. Recordé que existía la opción de moderar los comentarios, es decir, que aunque vosotros los escribáis, sólo se publicarán cuando yo dé mi autorización. No es la solución idónea, lo sé, pero ahora mismo con mi paciencia al límite, considero un mal menor que no veáis publicado vuestro comentario en el momento. Espero que me entendáis y lo aceptéis, al menos de momento.
Yo no me evitaré seguir leyendo estas perlas de la lengua, pero os las esquivaré a vosotros.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Se agradece el no obligar al registro (que aunque ya estoy registrada no me agrada que mi correo esté tan a la mano)

Sus un beso!

Anónimo dijo...

Lo acepto, te entiendo y te aplaudo.
Hace un dia precioso para malgastar ni un segundo de mis pensamientos en "anónimos"

Besos mil

Anónimo dijo...

Descubrí el por qué Seda consulta con su almohada XD

http://vidaenmarte.files.wordpress.com/2007/11/almohadasculogordo.jpg

Unknown dijo...

Yo no soy anónimo, soy Pica, pero si quieres también puedo ponerme chulito y decir barbaridades, todo sea por una amiga. Tenía esto en favoritos pero totalmente olvidado de la mente, me has recordado a Sabina, hace la tira que no escuchaba nada de él (manía que le cogí cuando me enteré que había ido a los toros)

Anónimo dijo...

Lo que tu hagas con tu blog, bien hecho está.

Seda dijo...

¡Caracol! Ya era horita de que te pasases por la ruta de la seda ¡eh!
Cuantísimo me alegro de verte. A ver si ahora que has encontrado el camino, no se te olvida. ¿Has dejado miguitas de pan por el camino? :)

Anónimo dijo...

bueno, vamos a ver, una cosa es ser amigos y molesarte que alguien te insulte, y otra es comapartir, las ideas.
Yo, simplememte en la entrdda que no comparto no pongo comentario y en la que me parece bien opino. Pero no soy "un cacho carne con ojos. lo que no me impide compartir.... otras cosas, pero como no insulto...

Tampoco me gustaria opinar y que me insultaran por ello.

Besos..... muchos

olinda dijo...

Te entiendo perfectamente. Habia entrado un troll en tu blog. Besos y gracias