El color del cristal con que se mira

jueves, 11 de junio de 2009


Son las doce y media de la noche. La ventana está abierta y mi cabeza también. No, no os asustéis, no me la he roto, quiero decir que dentro tengo un montón de cosas que bullen y rebullen sin encontrar su espacio.
Tengo este blog medio abandonado, y eso siendo generosa. Llevo semanas pensando. ¿En qué? buena pregunta. En la mar y los peces, en lo humano y lo divino, en las necesidades y las flojeras, en los viajes y los encuentros, en las caricias que no llegan, en las hojas del calendario, en la vagancia que me atenaza, en las salas de espera...
El lunes me dieron la mayor alegría del año. Las alegrías deberían poder tocarse y olerse, al menos en el mismo instante que se hacen tuyas y cada día, desde hace meses compruebo que nunca fue más cierto que todo resulta ser según el color del cristal con que se mira.
Me encontré a un vecino de sillón de mi padre en el pasillo que lleva a oncología. Llevaba una herida bastante fea en su pelada cabeza. Me contó que se había caído por las escaleras y añadió jocosamente:
-¿Te das cuenta? no hay manera de morirme, ni tirándome escaleras abajo.
Yo sólo pude reirme con él (aunque en el fondo no tuviera ninguna gracia) y pensar que en su lugar yo, no hace mucho, hubiera dicho:
-¿Te das cuenta? si es que soy una desgraciada, todo me va a parar a mí, tenía poco con lo que tengo que encima esto.
Diferentes colores de cristales, sin duda.

Acabo de anular un viaje que tenía programado para dentro de unos días a Santiago de Compostela. El tendón de mi rótula derecha se ha empeñado en hacerse amigo del nervio ciático y en cuanto pueden van a verse. A mí las amistades por interés nunca me han gustado, y eso de que se junten únicamente para joderme la rodilla me tiene bastante cabreada. Así que me he propuesto separarlos definitivamente y que el tendón se junte con la tendona y el nervio con la nervia y se dejen de experimentos. Como decía nuestra ilustre Ana Botella, las manzanas con las manzanas y las peras con las peras. Pero mientras consigo el triunfo, tengo que dejar a los gallegos aparcados, muy a mi pesar. Es la segunda vez que anulo un viaje en seis meses con los billetes en la mano. Sin embargo, cuando me ha llamado una querida amiga para decirme que le había tocado un viaje a Praga, lo único que me ha salido ha sido: Llévameeeeeeeeeee. Y si los hados me son propicios (y más les vale a los hados esos que así sea) dentro de unas semanas leeréis una entrada titulada: ¡Me voy a Praga!
Y si no me voy a Praga, me iré a Socuéllamos, o a Barcelona, o a Villaconejos de Arriba. Pero iré a algún lado, estoy segura.

El lunes, el de la alegría, hubo gente que me dijo que le encantaba verme contenta, y eso es porque normalmente parezco la antología del desánimo. El lunes, el de la alegría, empecé un relato sobre las palabras, las palabras que no encuentras en el diccionario para expresar cómo te sientes. El lunes, el de la alegría, cambió el color del cristal.

Buenas noches

10 comentarios:

Olinda dijo...

Que coñazo Seda lo de la rodilla....uffffff

¡¡¡¡Que suerte que te vas a Praga!!!!

Es muy cierto que todo depende del lado que lo vemos y, porque no, de que por algo será... que en Praga te espera algo nuevo...

Te mando un beso Seda y espero que mejores pronto de la rodilla

pilar dijo...

Buenos días, guapetona, me ha dado una gran alegría, encontrarte aquí en tu blog, al que visito todos los días, por si se te ha ocurrido algo nuevo, ya que me encanta leerte.
(parece una carta de las de antes, jajajaja)
No, en seri, VENTE PA SOCUELLAMOS y veras que bienlo pasamos.
Muchos besos.

pilar dijo...

a Socuéllamos, después de Praga, por supuesto, y dile a tus rótulas y tus nervios esos que tienes, por el cuerpo, que te dejen un poco tranquila leches.

sauce dijo...

Pos ya que te ha dado la vena viajera... a ver si nos toca...;D

Un besazo y sigue así de contenta. Se te ilumina hasta la voz...

Luji dijo...

???? Y Sabina????

???? Can Cun????

Y la de cosas que faltan!!!!

Seda dijo...

La culpa de lo de Sabina fue de Labegue, que me tuvo al teléfono exactamente 1 hora 48 minutos y 13 segundos y cuando colgué ya se había pasado el jueves. Y como es el jueves, Sabina, y no el viernes, Sabina...puesssss...eso, que las culpas a la susodicha.
(Aprovecho que no tiene Internet y no se puede defender jajajaja)

Nayra dijo...

Sedita vente pal Sur :D

Opciones no te faltan, los "susodichos" ponmelos delante que ya les dire yo cuatro cosas!!


Mira que si está en Praga? jajajaja
mejor Socuéllamos que pilla más cerquita ;P

josman dijo...

vaya...."el color de los cristales" se llamaba (o se llamará) una entrada que tenia por ahí a medias, aunque con esta tuya no tiene demasiado que ver, quizas que habla del marido de la sra. Botella...y ya que estamos, yo usaria la diplomacía con ese nervio ciático y ese tendón rebelde y ya veras como en un pis pas está cada cual en su sitio y tu de pateo salvaje por tierras checas...

Anónimo dijo...

eso, eso..... todos pa Socuéllamos, la verdad es que queda genial pa todo el mundo, porque como esta en el centrooooo

Yo os espero con los brazos abiertos.
besos

Labegue dijo...

Es evidente que mientras charlaba con ella por teléfono, la tenía ahorcada con el cable del mismo.

Así de mala perra soy.


Ainssssssssssss