Si tuviera

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Si tuviera que hablarte de algo sería del tiempo. No me refiero a isobaras y anticiclones, sino a la figura de dedos huesudos que vive dentro de los relojes. Equinoccios y solsticios se suceden vertiginosamente sin contar con mi opinión, y apenas he caído en la cuenta de que los árboles han tapizado de oro las calles, cuando ya descubro atónita una explosión de verdes, rojos y malvas que hacen las delicias de las hacendosas abejas. Pero me resulta inútil medir el tiempo de esta manera porque yo lo tengo dividido en dos: el que pasé contigo y el que pasaré sin ti.

Si tuviera que acariciarte algo sería el alma. Las yemas de mis dedos apartarían tímidamente las telarañas que cubren sus rincones hasta descubrir el pequeño hueco en el que me escondes. Y entonces tu alma y yo, finalmente encontrados, jugaríamos desnudos a la gallinita ciega y bailaríamos tangos desgarradores hasta agotarnos. Cuando la madrugada nos sorpendiese me dormiría con tu alma enroscada en mis manos para poder acariciarla en sueños.

Si tuviera que regalarte algo serían palabras en tu oído. Las vertería despacito, con sumo cuidado, evitando que se derramara fuera de ti ni una sola. Mi boca rozaría tu oreja con cada sílaba deseando contagiarte el intangible escalofrío que provoca tu cercanía. Temblaría mi voz al visitar tu nuca mientras te hablo, presagiando un seísmo de temores. No sería capaz de hacer otra cosa que no fuera saturar tu laberinto de ternura incontrolada, pespunteando con pasión jugosa sus aristas.

10 comentarios:

Labegue dijo...

Precioso.

josman dijo...

decir que eso es poesía en estado puro sonara mas cursi que una pianola, pues lo siento, porque así se queda

un beso

sauce dijo...

Me ha encantado. Y mucho...

Seda dijo...

Muchas gracias, chicos. Sois unos soletes, de verdad.

Aprovecho para decir que hoy no hay Sabina porque me pueden los nervios nerviosos. Y me pueden porque mañana...
mañana...
mañana...
mañana voy a verlo en vivo y en directo, a dos metros escasos de mí, y eso...no pasa todos los días.
Gracias de nuevo.

Si tu supieras dijo...

Muy bonito ;)

Darko Wiggin dijo...

Aunque suene agridulce lo leido, todo un despliegue de arte inspirador...

Astarté dijo...

No sé qué preferiría, si que alguien me escribiera algo como esto o poder escribirlo yo...

Seda dijo...

De nuevo gracias por vuestras exageradas palabras.

francesca dijo...

Precioso, te importa que lo ponga en mi blog? si te molesta dímelo, lo quitaré.

Seda dijo...

No me molesta, Francesca, por supuesto que no. Además... ¿quién es capaz de negarle algo a la protagonista de "Los puentes de Madison"?